El combustible, el agua y el aceite del motor se relocalizan a nivel del suelo en el lado derecho de la máquina a fin de facilitar el acceso.
Han cambiado de un freno de zapata de tambor accionado por aire a un freno de discos sumergidos en aceite de tractor accionado hidráulicamente y un calibre seco de traílla.
Esta característica permite que la máquina controle solo el resbalamiento de los neumáticos del tractor.
En caso de un suceso de sobrevelocidad del motor, el freno de compresión o los frenos se conectan automáticamente sin intervención por parte del operador. La máquina determina la condición de sobrevelocidad en función del régimen de aceleración y aplica los frenos de compresión automáticamente.